sábado, 16 de mayo de 2009

LA DESPEDIDA



Cuando una madre se despide,
deja el suspiro en el viento,
el alma se hace liviana,
el cuerpo se queda en la muerte.

No estará cuando quieras abrazarla,
habrá silencios, miradas,
pero nada como la voz anhelada.
Vivirás recordándola, sintiéndola,
en cada rincón de la casa.
Callarás para ver si sientes su voz
en tu enorme vacío.
Querrás refugiarte, para ver
si se te quita el frío.

Buscarás el pasado y recordar
lo que con ella has vivido.´
Cuando una madre se despide
sus maletas ya están cargadas,
su fecha de vencimiento está marcada.
No hay remedio ni cura, sólo despidos.
Las lágrimas te azotan y se escuchan
sólo gemidos.

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